La osteopatía nos permite el tratamiento holístico del cuerpo y conseguir recuperar o potenciar la capacidad autocurativa innata que posee. Se puede comenzar a tratar desde muy temprana edad como los recién nacidos (estamos especializados en Osteopatía Neonatal) y continuar hasta la senectud para mejorar la calidad de vida.
Se tiene en cuenta el estado visceral del paciente por los dolores referidos que pudiese provocar (lumbalgias, ciáticas, dorsalgias, tortícolis) y la respiración primaria del sistema meníngeo mediante la terapia cráneosacra.
Las patologías más comunes en las que la osteopatía tiene un alto éxito en la edad neonatal son: cólicos de lactante, tortícolis congénita, plagiocefalias no sinostósicas, frenillo lingual, bronquiolitis, estreñimiento, problemas de sueño, otitis de repetición, etc.
Durante la infancia y adolescencia se acompaña al desarrollo motor vigilando que los estímulos sean los correctos y dando libertad de movimiento a zonas bloqueadas por hábitos posturales o traumatismos acontecidos: esguinces, tendinitis, tortícolis, bloqueos articulares o costales, escoliosis posturales, bloqueos diafragmáticos, etc.
En la vida adulta los problemas que se presentan con mayor frecuencia son: lumbalgias, ciáticas, cervicalgias, mareos, accidentes de tráfico, tendinitis, epicondilitis, parestesias, esguinces, gonalgias, etc.
No dude en contactar para conocer como la osteopatía le puede ayudar a mejorar su calidad de vida.